domingo, 20 de septiembre de 2009

Jardín Gabi

Entre todas las incertidumbre floreció tu esencia en un viva la lucha y no el lamento. Cruzaste la noche con cierta prisa lenta al prolongar la extinta muerte de la palabra regresa que más que dormida, supo de sobra que nadie se encuentra tan cerca ni un tan lejos, para arrinconar el agua más clara que mantuvo encendido aquel rostro mientras lo acogían tus manos.

Manos de flores de luz plural, de matas tiernas en constante floración, acechando las hojas que al son del viento merodean desganadas.Como la tarde de éste ya lejano estío, entre olor a tomillo y verdores incipientes que se fecundan en el jardín donde todo sucede a su ritmo, he visto el brillo del limonero enamorado de un huido sauce cuando me besó tu memoria.